El viernes 12 de octubre, es una fecha importante para la América Latina, hace 520 años pisaba por primera vez Cristóbal Colón tierras americanas. Más allá de si antes habían pasado otros aventureros o no, lo que si es definitivo, es el impacto que tuvo este encuentro.
Pasaron muchas cosas durante estos últimos siglos, se encontraron muchos pueblos y culturas. No siempre fué un encuentro amigable y de igual a igual, ni lo sigue siendo hoy. América Latina, con sus muchas lenguas y cosmovisiones es la fusión y el choque de los pueblos amerindios, europeos y africanos, una de las mezclas más especiales de los últimos siglos en la historia de la humanidad.
América Latina con su carga histórica del pasado y del presente es hoy un continente con muchos retos, pero con pueblos con muchas ganas de ser, de crear, de soñar, de pensar, de compartir de liberarse de quienes los oprimen y no les dejan ser.
Ayer viernes 12 de octubre, en Lakino, las imágenes y sonidos de una América Latina activa y propositiva conquistaron las salas del cine Babylon con sus formas de ver el mundo tras 520 años de ese encuentro con las europas. Definitivamente las artes son unas de las mejores formas de crear diálogo entre los pueblos.
En una tarde otoñal berlinesa, con lloviznas, la gente que sabía de Lakino decidió salir de su casa y acercarse a esas miradas, tan diversas y variadas. Berlín es una metrópolis donde se encuentran muchas culturas. Lakino es parte de ese todo, en una Berlín cada vez más multicultural.
Siempre es bueno abrir ventanas de otras realidades, ver como ven, viven, observan el mundo en lugares distantes al que uno le toca vivir en la aburrida rutina diaria. Y es que el mundo es tan amplio, y a veces somos tan sedentarios. El cine es una de las mejores maneras de viajar sin moverse de la butaca.
Y si bien las historias en muchos casos son historias simplemente humanas, que le pueden pasar a cualquiera, hay historias que si son particulares y reflejan el entramado cultural, social y políticos que las hace posibles.
Con 3 Lakinos en la espalda y una cultura previa cinéfila, puedo decir, que no siempre se premia lo "específicamente" local latinoamericano, sino las buenas historias, bien contadas, universales o locales con buen nivel técnico, guión, creatividad, experimentación y propuesta, sorpresa, fluidez, aprovechamiento de los minutos al máximo.
Lakino sigue creciendo y consolidándose en la capital alemana, todo esto mientras sigan habiéndo cómplices del cine que quieran abrir un campo para ver y comprender al otro que hay dentro de cada uno.
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